19.4.06

en otoño hay sudestadas

¿Cuántas veces vamos a arrepentirnos de lo que hicimos? Mi viejo siempre me dice: no contestes con la misma piedra. No te tientes. No lo hagas. Hoy un amigo me cuenta: conocí dos minas, Juan. Me encantan. Las dos. Y después: pero yo no uso a la gente, ¿entendés? No puedo salir con las dos. No puedo. Y eso que la hermana ya le dijo ¡pero es que no es usarlas! ¡es conocerlas, mi amor! Una es de Reconquista, la otra de la Fundación Exportar. Una es castaña, la otra también. Tienen 27. Les gusta el fútbol. También el cuarteto y el rock. Son buenas minas. Las dos. Le digo: fijate, chabón. Fijate qué onda. Y él: es verdad, seguramente... Yo lo conozco a mi amigo: acepta razones. Pero no las cree. El mate está a punto. Suena Veneno y la Rosamonte ya nos pegó. En especial cuando el tipo canta: “Casi sin darte cuenta, se te puede enfermar el corazón... Cuando uno menos lo espera, el veneno ya está en tus venas...“ Rosamontero y de Quilmes. ¿Vale la pena rendirse? La Fundación Exportar es buena para el país. Fomenta las exportaciones y crea puestos de trabajo. Cuando lo vemos gambetear a Ortega ambos suspiramos. ¿Hay alguien que hoy juegue con el corazón? ¿Hay alguien que ría antes de meter un gol? Ya sé. La prueba es el chori. Invitalas a comer, le digo. Invitalas a la costanera sur. Pero llevate un buzo, eh. En otoño hay sudestadas. Mi amigo levanta la vista del mate. Sonríe. Le gusta la idea. Lo tienta. ¿Cuántas veces vamos a arrepentirnos de lo que hicimos? Te perdono.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me repito todo el tiempo diciendote que me entretiene muchisimo leerte! Cuando sea grande.. quiero ser como vos!