6.8.05

no me parece imposible

Hoy fue una mañana con mucho mutismo. Pero hoy a la tarde, la cosa mejoró. Volvió el Prode a la oficina y yo puse un sólo visitante: Newells a Quilmes (gol de Ortega, claro). En el campeonato pasado quedé bastante arriba en la tabla general. Muy buena ubicación según varios compañeros de trabajo más experimentados en el tema. Ya en Tea, una amiga petisa y limonera me regaló dos pines de las fiestas que hace. Me dijo: "Bah, no sé. Creo que vos no usás, pero bueno. Te los regalo igual...". Le agredecí y le dije: "No te creas, siempre quise tener uno. Pasa que no encontraba...". Los enganché al bolso en filita, uno debajo del otro. Está bueno tener pines. Lo recomiendo. Ahora me gustaría tener de Bruce Springsteen y de Sean Penn, dos capos que quiero mucho. Después, con con varios compañeros, fuimos a comer unas pizzas en Los Inmortales. En un momento de la charla, nos pusimos a hablar de Ana María Giunta. Nos llamaba la atención que siempre se la llamara por su nombre completo. Ana María Giunta esto, Ana María Giunta lo otro. Nos preguntamos: "Sus hijos cuando le pedían de comer, ¿también la llamaban Ana María Giunta?". Por ejemplo: "Ana María Giunta, me servís más salchichas con puré?". Quedó la duda, pero algunos concluyeron que sí. "Son esquemas que te vienen de chico, nos los podés modificar así nomás", dijo una amigo. "Ni siquiera cuando tenés hijos", agregó otro. En el momento no nos dimos cuenta, pero la idea que tiraron fue bastante pesada. Pesada en cuanto a su implicación. Esquemas que no van a cambiar ni aunque tengas hijos. Ojalá se equivoquen. No me parece imposible. Cuando pagamos las pizzas y salimos, el frío seguía pero había menos humedad. Por suerte el 152 vino rápido. Y por suerte me tocó un asiento con luz. Saqué Graham Green y me puse a leer. Ya estoy en los tramos finales y cuesta no pasar las hojas a toda velocidad.

2 comentarios:

nicoleta dijo...

Tal vez haya un pin insuperable: el de la 99. Pero no está en el mercado. La palabra TEA trae, ahhh, tantos recuerdos. Los hijos lo modifican todo: Gerardo dell' Orto ahora es dell'Oro. Lo hizo por sus hijos (él se la bancó solito varios años).

Anónimo dijo...

bueniiiiiiiiiiiiiiiisimo juancito!
yo quiero un pin de Butters, debe haber, si lo ven, regalenmelo!