22.8.08

amigos, préndanles una vela a los muchachos

Y bueno, perdimos. Nos faltaron algunos de los mejores soldados. Pero los que estuvieron, lo hicieron bien. Ellos, en cambio, mostraron la hilacha. Si hasta en un momento nos pusimos a tiro. ¡A las zancadas y rotos como estábamos! Fue impresionante verlo a Nocioni saltar a la cancha en una pierna y aún así arengar al equipo para remontar lo imposible. O a Paolo Quinteros y Juan Gutierrez, que jugaron poco y nada durante todo el torneo, asumir el compromiso más impensado desde la garra y el orgullo. Ninguno desentonó. Y eso, ¿quién te lo quita?

Ayer les decía a unos amigos: "Prendánles una vela a los muchachos".

Bueno, no sé si la virgen estuvo de nuestro lado. Pero el corazón seguro que sí.

2 comentarios:

Unknown dijo...

medalla de bronce, huevos de oro...

arengar, de eso se trata !

MatiAsF dijo...

a esa hora era buena idea prender una vela, seguro